"...es el eco de tu voz susurrándote el camino hacia ti, y chillando las emociones que tienes contenidas." bago.sofia
Un día dejé de escribir y poco a poco desaparecí. Me transformé en alguien desconocido. Inevitablemente, llegó la crisis existencial. "¿Quién soy?", nadie. "¿Lo que hice, hasta ahora, tenía algún sentido?", no, no había sentido en mi vida. Si no escribo, no soy; solo escribir y crear tiene sentido para mí. Escribo porque no puedo evitarlo. Dejar de escribir es dejar de ser yo.
Dónde nací, qué estudié, en qué he trabajado... todo esto pertenece a otras vidas, a otras "yoes" que están muertas, veladas y enterradas en mi pasado. Mi camino empieza aquí, sin libros publicados ni reconocimientos. Arranco con los cajones llenos de poemas y los bolsillos llenos de ganas.